Como soportar la indiferencia

Muy buenas a todos!

   Año nuevo, un 2012 que empezamos con ilusiones y proyectos renovados, con objetivos a corto y a medio plazo para alcanzarlos. Nuestros pensamientos provocan las palabras, las palabras provocan nuestros actos y nuestros actos provocan cambios. Que así sea.


 Quería hablaros de un libro que leí estas navidades; un libro que me llamó la atención cuando vi el título: “ODIO A LOS INDIFERENTES”; yo no odio a nadie, creo que es el peor de los sentimientos que se puede tener y que nunca atraerás nada bueno.
Tambien es cierto que algunas veces no resulta fácil soportar la indiferencia ante los problemas, ante las cosas que ocurren, ante la vida en general de una sociedad cada vez más aborregada y anestesiada, una sociedad que le da igual todo y que "solo llora cuando le va al bolsillo".

"Odio a los indiferentes" es un texto de juventud de Antonio Gramsci, confundador del partido Comunista Italiano, (lo de comunista es lo de menos, hay que leer de todo)  publicado en el año 1.917, una época en la que el Duce Mussolini prohibió todos los partidos de la oposición por el régimen fascista. Hay una intervención en el apéndice del libro sobre un proyecto de ley, en el que resulta interesante la discusión parlamentaria de Gramsci con Mussolini. Por cierto, entre otras vicisitudes, a Gramsci le cayeron 20 años de cárcel... malos tiempos en Italia para los comunistas...

"Estas cartas o ensayos son una antología de discursos de Gramsci que devienen el testimonio perdurable e inspirador de la lucha contra fenómenos como la apatía o la sumisión a poderes establecidos que coartan nuestras libertades. En ellos además de alegatos contra la indiferencia, críticas a la intolerancia y al arte del fingimiento en la política, hay proclamas a favor de la independencia judicial y quejas contra la inacción de los gobernantes".

Sorprende mucho que estos escritos tengan 100 años, ya que podrían haber sido escritos esta misma mañana.

Os transcribo aquí unos fragmentos que creo que valen la pena leer:

 “Odio a los indiferentes" son las primeras palabras a las que se enfrenta el lector. Pero después se hace necesaria la inteligencia, si se quiere cambiar. La inteligencia para comprender los muchos males de la sociedad, los que aún hoy están si resolver: la nulidad de la clase política; el transfuguismo; la ausencia del sentido de la institución parlamentaria en la conciencia pública; el conflicto política- poder judicial;  la escuela; los escándalos.

Odio a los indiferentes. “Creo que vivir significa tomar partido”. No pueden existir quienes sean solamente  hombres, extraños a la ciudad. Quien realmente vive no puede ser ciudadano, no tomar partido.La indiferencia es apatía, es parasitismo, es cobardía no es vida. Por eso odio a los indiferentes.

“La indiferencia es el peso muerto de la historia”. El la bola de plomo para el innovador, es la materia inerte en la que a menudo se ahogan los entusiasmos más brillantes, es el pantano que rodea a la vieja ciudad y la defiende mejor que a la muralla más sólida.
 

“La indiferencia opera con fuerza en la historia”. Opera pasivamente, pero opera. Es inevitable, es lo que no se puede contar, es lo que altera los programas, lo que trastorna los planes mejor elaborados, es la materia bruta que se rebela contra la inteligencia y la estrangula.

Lo que ocurre no ocurre tanto porque algunas personas quieren que eso ocurra, sino porque la masa de los hombres abdica de su voluntad, deja hacer, deja que se aten los nudos que solo la espada puede cortar, “deja promulgar leyes que después solo la revuelta podrá derogar, dejar subir al poder a los hombres que luego solo un motín podrá derrocar”.
 

“Vivo, soy partisano. Por eso odio a los que no toman partido, a los indiferentes”.

No odio ni a nada ni a nadie, pero no me dan igual las cosas que pasan, muchos de nosotros sólo mostramos "diferencia" cuando el problema que sea, nos atañe directamente y eso denota una actitud muy egoísta. Porque cuando pongas el grito en el cielo por lo que sea, no deberías esperar algo de alguien, al que mostraste indiferencia cuando podías haber tomado partido.

Es probable que los cambios hacia una sociedad más solidaria, menos egoísta y materialista en la que creo que es hacia la que vamos (pero muchos se aferran todavía en volver al pasado) tarden aún muchos años y los que vivimos hoy no la veamos; pero al menos, que ese de dar sin esperar nada a cambio, el compartir, esa solidaridad que se percibe cada día, todo ese cambio que al menos que comience con nosotros.

El libro es interesante, os lo recomiendo, son menos de 100 páginas de fácil lectura y sorprende que esos mismos males de hace un siglo, se repitan uno por uno en la política y la sociedad de la España de hoy. Esto ocurría en Italia víspera del régimen fascista., los pocos que elevaron la voz y odiaron aquella silente sociedad, indiferente a todo, acabaron asesinados o pisando la cárcel.
Es curioso como la historia se repite, y como los problemas de hace muchos años, vuelven una y otra vez, como si viviésemos atrapados en un bucle de tiempo.  


Bueno, pues empezamos un año 2012 económicamente hablando complicado, informes por expertos que no son políticos y que saben lo que dicen, (fuera de los sesgos electoralistas)  como el de Bloom Consulting nos dicen que el año 2012 no va a ser bueno, y a finales del 2013 la cosa empiece a mejorar. La realidad aunque sea dura hay que saberla y aún así, creo que a pesar de los pesares, tenemos 12 meses por delante y 365 oportunidades


 “el optimismo depende de nosotros mismos, vivimos mejor que nunca”  escuchaba el otro día…

Ya para finalizar, un video, un minuto, conciso y directo. A Jesús Quintero le tildaron el Loco de la Colina pero yo creo que este hombre está más cuerdo que muchos de nosotros...



"No te empeñes, en ser uno más, no pienses como un borrego, no digas lo que todos dicen, no hagas lo que todos, no seas una puñetera fotocopia más...
joder, no seas un borrego mediocre, cuando puedes ser alguien genial!"

Un abrazo y mucho ánimo a todos

Jano